El autódromo de Buenos Aires es, tal vez, el máximo escenario del automovilismo en nuestro país y uno de los más importantes de América del Sur. Su peso histórico lo convierte en un activo importante dentro de la “fábrica sin chimenea” que es el deporte motor. Sin embargo, parece ser el botín de una disputa política que se desató en el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires y que tiene también involucrados a actores del ambiente fierrero.

Días pasados, el diario Perfil en su portal digital dio a conocer que el Gálvez es uno de los lugares donde la interna de Juntos por el Cambio libra un nuevo round. La gestión de Jorge Macri delegó el control del trazado a la Secretaria de Deportes liderada por Fabián Turnes y esta, a su vez, terciarizó la administración a través del Fideicomiso que hoy encabeza Eduardo Ramírez.

Tal como explica el reconocido medio de interés general, Macri lleva a cabo una importante renovación política y en la pugna por el autódromo se encontró con un rival de peso como lo es Diego Santilli, quien durante el gobierno de Horacio Rodríguez Larreta tuvo importante injerencia en la pista emplazada en Villa Riachuelo. La novedad es que el pre candidato a Gobernador de la Provincia de Buenos Aires no está solo en esta idea de mantener el control del circuito, sino que cuenta con el acompañamiento de la Asociación Corredores Turismo Carretera (ACTC).

Perfil señala que la relación entre Santilli y la ACTC se fortaleció en los últimos años. Cabe recordar que el hijo de Santilli, Nicanor, compite dentro del TC Mouras. Además, la entidad que dirige Hugo Mazzacane estuvo en el evento presentación del reasfaltado del Gálvez y el Turismo Carretera fue el encargado de llevar a cabo la reinauguración oficial del trazado en agosto del 2023.

Según indica la publicación del diario Perfil, Mazzacane vería con buenos ojos inmiscuirse en la administración del autódromo de Buenos Aires por dos motivos puntuales. El primero son los negocios que se podrían generar no solo con la actividad deportiva que recibe el “Coliseo Porteño” y el segundo es el golpe de efecto que supondría involucrarse en un bastión históricamente vinculado al Automóvil Club Argentino (ACA) y la Comisión Deportiva Automovilística (CDA).

De darse esto, la maniobra de la ACTC recrudecería el enfrentamiento que ambas instituciones tiene desde fines del año pasado por el cambio de fiscalización del Turismo Nacional y el Turismo Pista. Además, la tensión entre ambos entes viene en ascenso luego de que la CDA comunicará la revocación del poder deportivo que le había conferido a la entidad teceísta en 2001.

Fuente. Carburando